lunes, 7 de mayo de 2012

Actúa

Hoy he estado en la presentación del libro "Actúa". Han estado varios de los autores coordinados por Rosa María Artal que puede decirse que es el alma del libro y cuya web recomiendo. Rosa también ha escrito un libro que se llama "La energía liberada" y que de momento no he leído. En general, todo gente con muchísima experiencia, muy bien informados y con ganas de cambiar las cosas a mejor. El libro, que lo he leído en parte, pero tengo pendiente acabarlo, trata de promover el activismo antes la actual situación de crisis permanente y también, tal y como se respiraba en el ambiente, de engaño constante en el que vivimos. Aquí pongo un resumen muy bueno del libro.

Se hicieron varias reflexiones, que en cierta medida están en el libro, y que me parecieron muy interesantes. Por ejemplo, Mayor Zaragoza, habló del punto de inflexión que hubo en el año 1989 en la política internacional que posteriormente ha derivado en una defensa del capitalismo en detrimento de los derechos sociales.

Me gustó una frase de Mayor Zaragoza que dijo que en lo político, todo aquello que no llenemos lo llenarán otros, en referencia a la extrema derecha y al fenómeno de Grecia con el partido que ha conseguido representación y de corte neonazi. La frase misteriosa de Zaragoza fue: "nos ponen ahí y no nos dejan hacer". ¿Pasará lo mismo con Hollande? Mira aquí el programa electoral que tiene, es de envidia, pero ¿le dejarán hacer?

La presentación que más me gustó fue la de Ignacio Escolar que argumentó cómo resulta el engaño de hacer pensar a la gente que la sanidad privada es mucho mejor y dio cifras como que en EE.UU. se gasta un 17% del PIB en sanidad y la gente que no tiene dinero se muere sin asistencia médica. Recalcó que en España se dedica un 6,6% del PIB a la sanidad pública y un 3% a la privada. Me gustó mucho su presentación y me dieron ganas de seguir más a esta persona y enterarme de lo que hace. Dejo un link a su magnifico blog.

A mi pregunta a Lourdes García de cómo se puede participar más en el movimiento 15M, me contestó que visitara la página toma la plaza en donde hay muchisima información sobre cómo participar. Muy interesante su ponencia.

También me gustó la ponencia de Carlos Berzosa que subrayó principalmente la crisis estructural del capitalismo en donde hay una hegemonía de las finanzas sobre la economía productiva.

El libro merece la pena leerlo y obtener varios puntos de vista que te pueden servir para estar más informado desde una óptica polivalente, ya que la situación actual es polivalente y muy compleja en donde es muy fácil perderse entre tanta información contradictoria.

También se incluye una perspectiva ecológica, el gran ignorado de nuestro tiempo y que nos puede dar un gran susto en el futuro, pues no hablaremos de una prima de riesgo, si no de catástrofes naturales de mucho mayor impacto en las cosechas y en la economía real. De eso habló un poco Juantxo López de Uralde de Equo.

Como crítica diría las siguientes cosas (algunas las comento en mi libro "la revolución colectiva"):

1. Sigue faltando más concreción a la hora de indicar qué acciones concretas hay que hacer ya que todavía se sigue haciendo demasiados análisis sin estar enfocados en acciones específicas. No vi una propuesta clara en la conferencias. ¿Qué hacemos? ¿Nos apuntamos a un partido político? ¿Hacemos uno nuevo? ¿Se trata de activar movimientos sociales? Aquí veo una falta de liderazgo abismal. Nadie sabe qué hay que hacer. Y esto es peligroso porque como aparezca un listo o lista con capacidad para liderar se va a llevar el gato al agua, aunque sus propuestas sean penosas.

2. Se hicieron numerosas críticas al PP con las que estoy de acuerdo y para mí se quedaron cortas porque lo de ese partido es de traca ya, pero no escuché ninguna crítica al PSOE y a la gestión de Zapatero de los últimos cuatro años que se ha ido de rositas y que no debemos de perdonar que permitió la burbuja inmobiliaria y que negó la crisis económica que se avecinó. Me dio la sensación de que era un libro de izquierdas o que "la izquierda es buena". Sigo pensando que como no abandonemos el debate ideológico vamos mal y caeremos en los mismos errores. Mira este mapa de la corrupción.

3. Un acto de un libro que se titula "actúa" y que no permite la participación de la gente mal va. Es decir, no nos damos cuenta pero seguimos en un modelo 1.0, es decir, autocrático, en donde la gente no participa. Estamos en empresas en donde la gente no participa, partidos en donde no hay participación, organizaciones en donde no hay democracia. Hace falta mucha más participación colectiva.

4. No se dieron puntos de encuentro en internet para seguir el debate lo cual a día de hoy es esencial y además estás desaprovechando la interacción y el dinamismo que internet te ofrece, pero que me dio la sensación de que los ponentes, por lo que sea, no dominaban o no utilizaban debidamente desaprovechando esa oportunidad. O que simplemente no dio tiempo o no estaba organizado así.

Por otro lado, a pesar de todo, creo que sigue haciendo falta informar de forma sencilla sobre determinados aspectos de la realidad que debido a su complejidad, en estos momentos, la mayoría de la población está muy confusa, a pesar de las miles de críticas que se vierten a diario en las redes sociales.

En definitiva, recomiendo el libro, pero (en mi opinión) han puesto un precio muy elevado como ebook (9,02 euros), igual que en papel. Otro síntoma de que seguimos en el modelo 1.0.

En general, me quedé con ganas de más y quisiera desde aquí dar mi más sincera felicitación a todos los autores y en especial a Rosa por este magnífico trabajo colectivo. Mi siguiente acción va a ser escribir a los blogs y pedir propuestas concretas para ponerlas aquí.

viernes, 4 de mayo de 2012

Los juegos del hambre (libro)

Siento mucho discrepar con la gran mayoría, pero el libro primero de los juegos del hambre de Suzanne Collins con más de 7.000 críticas en Amazon en su versión en inglés no lo veo a la altura de lo esperado. Es otro seudo producto de una industria que trata de vendernos como de gran calidad productos que no pasarían de aprobado en una competición con reglas más exigentes.

Hay que decir que, como anécdota, Suzanne Collins es hija de un Oficial de la Fuerza Aéra de los Estados Unidos, tal vez eso pueda explicar el ambiente militar que se respira en la saga.
Una historia sobrevalorada
pero que en cine funciona
muy bien

Ni siquiera tiene los ingredientes de un best seller ramplón ya que la trama se hace terriblemente lenta y no llega a arrancar hasta que no pasas al menos un centenar de páginas. Me costó un esfuerzo considerable leerlo y eso que soy amigo de los clásicos best sellers sin mayores pretensiones, del estilo de Juan Gómez Jurado o Los Pilares de la Tierra.

El principal problema, a parte de la ausencia absoluta de originalidad en el planteamiento, es la ausencia de contenido en los personajes que un poco más y podrían ser invisibles de lo planos que son.

La novela fue publicada por Scholastic Corporation en septiembre del 2008. Hay que saber que Scholastic Corporation es la misma editorial que ha publicado a Harry Potter, luego estamos en un juego de lanzamientos de Best-Sellers mundiales pretendidamente calculados con antecedentes en un grandísimo éxito como ha sido Harry Potter, para mi gusto de una muchísimo mayor calidad literaria en todos los aspectos.

Según la autora, la inspiración para escribir la novela le vino al ver la televisión, en un canal había un reality show y en otro la invasión de Iraq, de la mezcla salió The hunger games. Por otro lado, la historia refleja el mito de Teseo. La protagonista, Katniss, podría ser una Teseo del futuro y el marco de la acción, algo parecido a los juegos de gladiadores.

Sin embargo, y a pesar de querer darle un trasfondo mítico (en la película se habla de la traición de Séneca y hay un cierto aire griego en la decoración), el argumento es muy parecido por no decir igual a la novela de Koushun Takami, "Battle Royale", en donde un grupo de adolescentes tienen que luchar entre ellos en una isla para que al final quede uno solo. Otros ven referencias a "The running man".

Casi podíamos decir que The hunger games es una "americanización" de Battle royale, que como tal resulta muy dura para el público juvenil norteamericano y occidental, mientras que los juegos del hambre es mucho menos violenta con toques muy sentimentales: "hermanita pequeña", etcétera. 
Aunque con un estilo muy diferente y más "gore", Battle Royale
presentó antes el mismo argumento: un grupo de chicos y chicas
luchando entre ellos hasta que sólo quede uno.

Tengo que decir y admitir que la película, que vi ayer, me ha parecido muy buena, muy superior al libro. La película la comento aquí.

Todo hay que decirlo, en su versión en inglés en la página oficial de amazon en donde las críticas no están supuestamente manipuladas (aunque algo pueden estarlo), la mayoría de las críticas son buenas y la historia en sí despierta pasión entre muchos adolescentes, pero también hay voces discrepantes unas 200 o más que son el mínimo, e incluyo alguna aquí:


"Tengo 17 años y todo el mundo me ha recomendado leer los juegos del hambre porque son increíbles. Finalmente dije... por qué no?, independiente del hecho de que he dejado de leer novelas de tipo juvenil-adolescente. Sí, he leído algunas novelas juveniles buenas, pero los juegos del hambre son el ejemplo perfecto de que no voy a volver a leer ese género más veces. Lo que se anunciaba para mí como impresionante, de ritmo rápido, aventura, me aburrí de principio a fin. Con cada página, pensé que conseguiría mejorar la cosa, pensando que sin duda algo interesante que tenía que suceder o de lo contrario la gente no estaría tan obsesionada con él. Crepúsculo me ha enseñado que las personas pueden leer literatura de mala calidad y obsesionarse con ella, pero le di el beneficio de la duda.
El libro está muy mal escrito, utiliza el Punto de Vista de la protagonista Katniss, en primera persona. Cuando digo mal escrito quiero decir en relación con el diseño y construcción de la trama y los personajes y también en el estilo narrativo (e.g., muchos clichés, por ejemplo: "parece que he estado soñando", y uno que recuerdo "lo salado de la sopa me recuerda a mis lágrimas". Me pareció ridículo, like some moping Emo-stereotype) Y, como está escrita en primera persona, (*spoilers*?) comencé el libro sabiendo que NO iba a morir (por no mencionar que hay más libros en la saga). Nunca experimenté que estuviera pasando por verdadero peligro y ella no me gustó. While, admittedly, me gusta el CONCEPTO DEL LIBRO, no me gustó nada mientras lo leía. Los personajes y el argumento son uni-dimensionales. Todo resultaba muy predecible. Cliche. Aburrido. Inmaduro.

Lo triste de todo esto es que creo que a los adolescentes les gustará este libro porque no te exige "pensar" mucho. No tiene mucho contenido ni a un nivel de personajes más desarrollados ni tampoco con una trama que sea complicada de seguir. Si lo que queremos es que la gente de mi edad empiece a leer... ¿deberíamos darles historias tan vacías como ésta?"
Susanne Collins
Un libro, obviamente, agradable, a juzgar por los comentarios críticos muy favorables y lanzamiento de la película, pero algo vacío, que usa fórmulas, predecible y con muchos clichés.1) Los personajes no se enfrentan con decisiones verdaderamente morales, los malos son malos, los buenos son buenos, y el personaje principal no se encuentra con un dilema moral. Tenía la esperanza de que la trama le daría la oportunidad de explorar la naturaleza humana, la virtud, el coraje, la desesperación, etc, pero falla. No hay exploración válida de la naturaleza humana.
2) Como se ha mencionado por muchos otros, el argumento se deriva de "Battle Royale" No es un problema en sí mismo, excepto que "Hunger Games" no justifica adecuadamente sus recursos argumentales.





3) La conveniencia de los medicamentos que aparecen mágicamente y reglas que cambian espontáneamente no se prestan a una suspensión de la incredulidad. Estos eventos son artificiales.
5) Cualquiera que sea la crítica social que el autor haya querido hacer, se perdió totalmente. La sociedad distópica de los "Juegos del Hambre" es tan extraña que hay muy poco en el libro que se presta a la reflexión.
6) Muchas opiniones alaban su estilo de escritura, pero la autora cae en todos los clichés y no consigue pintar una narración intensa original.




7) Ninguno de los personajes realmente contempla la indignación moral de la trama central. Este es el elefante en la habitación. Incluso en tiempos de los romanos, los méritos de la arena fueron objeto de debate.
Con eso dicho, no puedo creer que ella deliberadamente pinte a sus personajes tan superficial, uni-dimensional, la inseguridad y los medios de comunicación obsesionados-(Katniss siempre está preocupada por cómo la gente percibe su "rendimiento" en los juegos del hambre) como un medio para cortar el cuello de la idiotez de la televisión de la realidad. No es una alegoría velada de cómo los televidentes en los Estados Unidos se entretienen observando a la gente que se explota en la televisión nacional. La falta de cualquier cuestionamiento verdaderamente profundo por cualquiera de los personajes es de alguna manera un reflejo de cómo los espectadores de televisión hoy en día no tienen ningún escrúpulo moral sobre la visualización de televisión de la realidad similar de explotación.En resumen, a lo largo de todo el libro me esperaba que se redimiera de alguna manera. No pudo hacerlo. Me subieron al carro, porque mis amigos estaban todos sobre él, pero se necesita un poco de persuasión para leer las secuelas.Otra crítica, esta vez positiva para ser justos, es la que también he encontrado en amazon, lo siento por la traducción no muy buena: Wow. Yo apenas era capaz de dejar este libro, un segundo después de las primeras páginas me tiene completamente enganchado. Suzanne Collins relata aquí tiene una inmediatez para que, cuando se combina con la trama de vida o muerte,muy dramáticaes muy convincente. Es entretenido, y muy inquietante a la vez. Si esto no era más que una buena lectura, me han dado 4 estrellas, pero dicen que el gran arte te deja cambiar después de que la experiencia ... y este libro sin duda lo hizo. Suzanne Collins, con un trabajo increíble, ella misma impulsó en mi estante de arriba.
La historia es básicamente sobre una adolescente que se ve obligada a competir en un evento de 24 participantes en donde uno solo sobrevive. Si te gustó The Running Man, te gustará the hunger games.Y


Otra más: 

Me tomó un tiempo hacerme con este libro, ya que nunca lo vi fuera del alcance de mis dos hijas ". Lo devoraron! Una vez que lo leí, lo entendí. Este es el segundo libro que he revisado este mes que tenía una protagonista femenina de gran alcance (el otro era Graceling").

En resumen, y siempre considerando que esto es muy subjetivo y que para gustos los colores, la novela me costó un esfuerzo al principio, los personajes muy planos y aburridos sin ninguna conexión con la realidad y sin nada más interesante que contar que la simple "cacería" y los detalles relacionados, hacia el final, me empezó a interesar más y hubo un momento en que me agradó algo, pero en conjunto la valoración que tengo que hacer, es junto con esos 200 adolescentes que escriben una mala crítica, que es una novela muy sobrevalorada, probablemente empujada con un marketing para ser el próximo crepúsculo, un libro comercial con tintes de originalidad que no da la talla en ninguno de los aspectos que pueda tener una buena novela. Y como dicen más arriba:



  • Hay muchos Deus Ex Machina que arreglan problemas sin venir a cuento.
  • Los dilemas morales y éticos que plantea quedan muy mal resueltos.
  • Los propios personajes no se implican en el dilema de los propios juegos y actúan como autómatas vacíos.
  • La historia de amor es penosa y metida con calzador.
  • Los buenos son muy buenos y los malos muy malos.
  • Muchos clichés e ideas comunes ya utilizadas pero malamente aprovechadas. 
  • Coincido en que el personaje femenino de Katniss no despierta ninguna simpatía: de hecho no es muy creíble, que una semi-analfabeta tenga tanta seguridad en sí misma, sólo porque sabe manejar un arco, además parece estar por encima del bien y del mal y es muy poco humana. (lo que no ocurre en la película, de ahí el cambio radical).

Una novela sobrevalorada que no da mucho qué pensar. 

(Perdón por el formato un tanto caótico!!)

jueves, 3 de mayo de 2012

Campeones: Pan y circo

Manifestantes hoy en Barcelona en contra de los
recortes en educación.
Mientras que en Barcelona se reúne el BCE y miles de manifestantes, en su mayoría estudiantes se manifiestan por una ciudad tomada por 8.000 policías, en Madrid se dedican a festejar otra vez un acontecimiento futbolístico.

Es la vieja fórmula que utilizaban los romanos de tener al pueblo distraido de la política mediante continuos entretenimientos. Lo que hoy en día se puede traducir a una política cerrada a la participación ciudadana y una extensísima lista de manifestaciones deportivas plagadas de éxitos, contiendas, rivalidades, declaraciones, estrategias, grandes eventos, noticias y un largo etcétera que mantienen a la ciudadanía ampliamente ocupada en seguir y estar al día de los numerosos eventos deportivos.

La cabalgata de los ganadores
Hoy en Madrid por ejemplo, como si de una carroza romana se tratara, el equipo ganador de turno, se pasea por la "avenida de la victoria" (metafóricamente hablando) rodeada del pueblo que les aclama como los vencedores, los grandes vencedores de la contienda. Mientras, en los medios de comunicación no hacen otra cosa que dedicar miles de horas de informativos, tiempo de reporteros, fotógrafos y analistas para diseccionar toda esta parafernalia deportiva, el gran éxito deportivo del momento, lo más grande a lo que puede aspirar el ciudadano medio.

No creo que lo hagan con la misma intención que lo hacían los romanos, pues la sociedad de hoy es muchísimo más compleja, pero me permito sospechar que políticamente es muy rentable tener a todo el pueblo hipnotizado con los grandes éxitos deportivos, a todas horas, en todos los medios, en todos los sitios y con diferentes tipos de contiendas: una vez es el fútbol, otras el tenis, otra los coches, que luego las motos, después el baloncesto, que si otra vez el fútbol... no hablamos de ver un partido de vez en cuando, hablamos de una droga que tengo que tomar cada día.

Se ha conseguido que la gente se involucre tanto en las contiendas deportivas que la mayoría lo vive tan intensamente que es como una religión, una especie de fanatismo radical sin el cual no se puede vivir, hay que estar todos los días hablando de lo mismo, comentando, leyendo, actualizando información. Démosles a los entrenadores un oráculo para que hablen y profeticen cómo deben de ser las cosas, permitamos que hablen y hables de estupideces y creamos que eso es lo más importante a lo que podemos aspirar.

Está claro que hay una inmensa marea de grandes éxitos deportivos que inundan los medios de comunicación y que curiosamente se da en muchos otros países dictatoriales como Corea del Norte o también en Cuba o en la antigua URSS, pero también en los países mal llamados "desarrollados". La fórmula viene de la antigua Roma, pero se mantiene hoy en día en casi todas las sociedades en donde se necesita distraer la atención.

¿Y si dedicáramos la mitad de las horas dedicadas al
fútbol a solucionar el cambio climático? Ay! perdón!
que es un problema que no existe...!!!
El problema es que hoy en día ni siquiera te dan el pan y se está quedando todo en circo y más circo, mientras que todo lo demás se vuelve igual a cero, te lo van quitando.

Mi reflexión es que la sociedad se ha vuelto enferma de verdad. Tan enferma que ni siquiera se da cuenta que todas estas adicciones nos alejan de construir un mundo mejor y nos van sumergiendo en la insensibilidad, en la idiotez y en la incultura del pueblo bárbaro que no piensa en otra cosa que en el éxito de la próxima estúpida contienda deportiva.

¿Somos campeones? ¿De qué?

Toda esa energía estupidamente focalizada en las constantes e interminables manifestaciones deportivas sería millones de veces más provechosa si se dedicara a trabajar en solucionar los problemas que tenemos de verdad, aunque sólo fueran dos: el hambre en el mundo y el equilibrio ecológico.